Esta vez has decidido que vas a ser tú mismo quien se ocupe del embalaje de las pertenencias que te vas a llevar en tu mudanza. Después de valorar todas las opciones, consideras que en esta ocasión es más práctico y, por qué no, barato que no sean los de la empresa de mudanzas quienes hagan esa tarea de embalaje. Pero, no por eso te tienes que olvidar de que cuanto más profesional sea en el embalaje, menos riesgos corres de que tus enseres sufran algún desperfecto.
Nuestra recomendación es que te hagas con material de embalaje específico para una mudanza. Son muchas las empresas que se dedican a la fabricación de todo tipo de artículos y materiales para embalaje y se sus productos se venden también a particulares, no solo a empresas de mudanzas.
Además, en muchos casos ya no estamos hablando de las tradicionales cajas de cartón que, en muchos casos, acababan destrozadas después de la mudanza. Ahora, puedes conseguir un embalaje de plástico, en multitud de formatos y tamaños. Piensa que son un poco más caras, pero puedes darles infinidad de usos una vez acabes tu mudanza.
Por ejemplo, estas cajas de embalaje pueden servirte como contenedores para el almacenaje de tu ropa cuando hagas el cambio de ropero por temporada. En este sentido te pueden resultar especialmente útiles los modelos de cajas de embalaje tipo armario, que usaste para el embalaje de trajes y otras prendas que van colgadas en perchas durante una mudanza para evitar que se arruguen.